Hola, me llamo Manel, soy cuarta generación de abaniqueros de Aldaya. Teníamos un pequeño pero esmerado negocio de abanicos de artesanía auténtica española. Hemos sido uno de los afectados por la Dana de la noche del 29 al 30 de octubre, y cada vez descubrimos que las pérdidas son mayores. El sector abaniquero se encuentra en su práctica totalidad el Aldaya, una de las zonas más devastadas, y nos queremos resistir a que muera el sector, tan tradicional valenciano y español.